Vestirse y comer…

Dos necesidades básicas para cualquier ciudad. Por ello, las tiendas y los almacenes de ramos generales fueron algunos de los primeros comercios que se instalaron en la ciudad.

Almacen (Foto Gabaldón)

Hubo en Allen una gran cantidad de almacenes de ramos generales desde los inicios del pueblo. Uno de los más importantes de este período, en Allen y en la zona, fue el de Diez y Fernández, en Orell y Mitre, hoy supermercado Bomba. Tenía desde materiales de construcción hasta alimentos y ropa de trabajo, el depósito estaba sobre la calle Mitre (hoy Verna). También Rostoll tenía un almacén en Juan B. Justo y Orell, que…

“luego lo compraron Abundio y Dositeo Fernández, que estaban con Diez, lo cerraron y los hijos de Rostoll pusieron otro negocio.  Desde  1935 los hermanos Emilio y Francisco Martín se hicieron cargo del almacén ‘La Catalana’ que había sido de Sebastián Josa, este almacén tuvo la particularidad de llegar cada día a distintos puntos de la zona rural con una camioneta donde llevaban los elementos de mayor venta para que los vecinos de esos lugares no tuvieran que trasladarse hasta el centro  También estaba la carnicería de Félix Hadad; Fernando Gabaldón tenía un taller mecánico;  Alonso , la sodería Limay que fue de las primeras, estaba en Velasco y Mitre y repartía lo sifones en un carrito tirado por un caballo. Luego instaló una sodería Concetti que hacía la soda con una máquina que llenaba de a un sifón… toda de hierro, alimentada por gas, se llenaba el sifón con agua, se le ponía el gas y a veces explotaba, ¡y eso que eran esos sifones de vidrio grueso! También allí se vendía forrajes, pasto, maíz, bebidas, etc. La máquina de Alonso era más moderna, llenaba de a dos sifones por vez. Después la compró Van Opstal, éste  luego  la vendió a Marcheggiani y a mí. Le agregamos vinería y gaseosas, con la distribución exclusiva de Crush. Luego quedó para mi cuñado Emilio Coziansky quien finalmente se la vendió a Petisco” (Vega, G. A. 2008).

Taller mecánico de Gabaldon

También fueron numerosas las tiendas de ropa en la ciudad. Ejemplo del camino que puede recorrer este rubro es el comercio de José Shaltz quien a penas llegado al pueblo comenzó a vender ropa de puerta en puerta:

“José Schaltz llegó a Allen en 1947. Primero se había radicado en Neuquén desde donde recorría en bicicleta chacras y casas de Neuquén, Cipolletti, F. Oro y Allen. Con su valija llevaba mercadería de mercería y algo de ropa. La gente lo esperaba para proveerse, ofreciéndole un mate o algo fresco en verano. Cuando se estableció en Allen alquiló una esquina y el trámite de alquiler fue ‘de palabra’ sin nada firmado. En su local nuevo tenía que poner ‘todo estirado para que no se vieran los huecos pues era demasiado grande para la mercadería que tenía. Yo lo que recuerdo es su pinta, siempre de traje y corbata, su bondad y honestidad. Es lo mejor que recibí y me encanta que hoy, todavía (ya hace 10 años que falleció) haya gente que viene a la tienda de Don José y lo recuerde con tanto cariño’”  (Silvia Schaltz para Hola Vecino, 2001).

José Skop fue uno de los fundadores de la Colonia israelita. Casado con Brana Dygola, Skop vino de la Capital Federal y se instaló en el pueblo (Río Negro, 1965).

“Mi abuelo José y mi abuela Brana habían nacido en el mismo pueblo, Dobzyn,  Polonia. Mi abuela sí era polaca pero mi abuelo era ucraniano pero era por esas cosas que, cuando estaban aburridos los rusos (al igual que los alemanes) lo primero que hacían era invadir Polonia” (José “Punchi” Zenker, 2010)

José con el tiempo quedó como encargado de la tienda, ubicada en la calle central (actual Tomás Orell).  Según el actual dueño de la tienda, Maucho Zenker, esposo de Luisa Skop, hija de José, el nombre se debe a que el apellido de los hermanos Schuvaks era muy difícil de pronunciar y como tenían una dentadura con algún diente de oro, se decidió este como nombre de fantasía. En 1952 José se asoció a la empresa y compró la casa central, la cual aún hoy sigue en pie. Además de ser presidente del Club Unión, Skop participó en toda comisión de fomento y cooperativas hasta su muerte, en 1958.

Tienda Diente de Oro

"Te describo la foto de derecha a izquierda: Detrás de la vieja registradora se encuentra la que fue esposa de Bellegia, era de apellido Martínez, en ese momento era cajera. Detrás del mostrador, sobre la escalera de madera Fidencio Iraira (fallecido), al fondo Ivanover Arévalo, el más bajito y el alto es Pompilio Lamela. A la izquierda está Marta Manzur, mi mamá Brana Dygola, mi hermano Isaac, don José Skop, mi  papá y yo. En las viejas estanterías, arriba, al fondo, se observan valijas (en esa época eran de cartón, con refuerzos de madera. Le siguen hacia la derecha cajas de zapatos y bajando hay pantalones. Más abajo estaban las alpargatas de suela de yute, que yo a los 6 años tenia la responsabilidad de acomodar por orden numérico. Sobre el extremo izquierdo hay dos grandes estanterías llenas de sombreros y gorras. Adelante en una vitrina de vidrio bajita se ven cintas y cosas de mercería, también relojes. Fidencio está acomodando telas. Creo que esta foto es del año1952 o 53" (Luisita Skop de Zenker)

Mas fotos y publicidades de comercios locales en: Archivo (fotográfico y periodístico). Algo más...

Los almacenes de Ramos Generales fueron comercios de los siglos XIX y XX que funcionaron en pueblos y lugares estratégicos de la campaña que se dedicaban a varios rubros.

Los colonos establecidos en la zona rural, antes de la fundación de Allen, debían realizar sus comprar en el Fuerte General Roca, lo cual demandaba varias horas. Un lugar al que se llegaba a caballo, sulki u otro vehículo tirado generalmente por caballos. Los primeros pobladores hacían sus compras en los almacenes de Ramos Generales de Alonso y Pérez, en Amaya Hermanos, Jesús Méndez, Francisco Marauri, Joaquín Pérez o Miguel Yunes. Las tiendas más visitadas por las damas que buscaban telas, hilos, botones o puntillas, tenían nombres tales como “La Flor del Día”, “Los Vascos” y “El Proveedor”. La guía comercial Edleman de 1924 menciona ocho bodegas dedicadas a la elaboración de vinos y certifica la existencia de los almacenes de Ramos Generales de Rafael Amaya, Tomás Aragón, Salvador Auday, Julio Bercovich, Botas y Fernández, Fernández Alonso y Carrero, Sucursal de José González, Sebastián Josa, Joaquín Pérez, José Rodríguez y Diego Rostoll. Estos almacenes incluían otros rubros como zapatería, tienda, ropería, bazar, materiales de construcción, herramientas, maquinaria, venta de cubiertas, combustibles, plaguicidas y fertilizantes. Muchos tuvieron la representación de bancos nacionales o regionales, o eran representantes de firmas internacionales. El último almacén de Ramos Generales de Allen fue el de Diez y Fernández (foto), ubicado en la esquina de Mitre y Tomás Orell.Reseña sobre los almacenes de Ramos Generales (por Mercedes Amieva de Boyé para ciudaddeallen.com.ar). Walter Benjamin sobre los alamacenes AQUI

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