AVISOS AL POBLADOR RURAL
-Para María de Chaiful, que espere en la tranquera, a las 12 hs pasará García para llevarla al pueblo-
Ya doña Ramona llevaba varias horas levantada, movía un poco las brasas y por momentos todo el humo volvía a nublar su vista y ella a toser. Por el pequeño ventanuco con dos vidrios partidos miraba el patio y la nevada era cada vez más fuerte.
-Se comunica a Ramona Antilaf de Atraico, que debe presentarse urgente en el hospital local-
Ramona, como muchos, había conservado las reservas de las pilas para momentos como este, miró nuevamente hacia afuera y le corrió un frío más intenso por la espalda.
Miró hacia la escuela y se dio cuenta de que las cosas se complicaban…¡¡Carajo!! no está la maestra, esta por lo menos tiene esa basura de auto y me podría acercar.
Ojalá «el viejo» me aguante un poco más, le quiero dar un abrazo, tantos años juntos, casi desde el 70.
-Para María de Chaiful, Dice García que no la espere hoy, se rompió el camión-
Y Ramona no lo pensó más, armó un bolso chico y se largó a caminar, 10,15 hs, tenía que llegar, hacia el Norte unos 15 kilómetros, en recto, por la ruta unos cuantos más, pero que ¡carajo! importaba la ruta si la maestra no estaba y el cascajo tampoco.
Miró al cielo, más negro, los copos ya eran plumas, el viento del Oeste cortaba como navajas y silbaba entre los coirones que apenas dejaban ver sus puntas. Todo blanco, le dolían los ojos y cada tanto le daba un rodillazo a las piedras, basalto puro y duro.
En algún momento invocaba a su Dios, por lo menos dejame llegar…
Tres horas y media más tarde, azul del frío, con rodillas que parecían dos de cada lado, sangrando, llegó a la puerta del hospital.
-Para Rogelio de Atraico, se comunica que debe presentarse urgente en el hospital-
El viejo no pudo esperar, Ramona no alcanzó a ingresar…
.Así de dura es la vida en la Linea Sur…Y los teléfonos no funcionan…
Autor Francisco Azzaro
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